Vigo calienta motores para acoger su día grande, en el que el Cristo de la Victoria recorrerá “las estrechas calles del Vigo antiguo” acompañado por miles de fieles.
Y lo hizo con el tradicional pregón, que este año tuvo como protagonista a José María Fonseca, presidente del grupo gallego Terras Gauda, que aprovechó la tribuna en el Pazo de Castrelos para pedir que se “aglutinen voluntades para entre todos llevar a Vigo a una nueva reconquista de los valores económicos y solidarios”.
Ante numerosas autoridades como concejales del Gobierno Municipal; el subdelegado del Gobierno en Pontevedra, Antonio Coello; el conselleiro de Sanidade, Jesús Vázquez Almuiña; o la presidenta del Consorcio de la Zona Franca de Vigo, Teresa Pedrosa, Fonseca pidió que “nuestros dirigentes tracen con criterio, generosidad y altitud de miras las líneas de concordancia que deben canalizar el esfuerzo colectivo”.
El alcalde de Vigo, Abel Caballero, aseguró que este primero de agosto “la tradición toma las calles de Vigo y mira a nuestra historia, al mar del Berbés y a nuestro antiguo y nuevo Casco Vello, que protege nuestro pasado con cálidas manos de piedra”.