Muere el dueño de Migueláñez tras caer por un barranco cuando practicaba caza de alta montaña en Rusia

Mario Migueláñez, dueño de la empresa de dulces Migueláñez, fallecía a los 43 años tras sufrir un accidente en el Cáucaso mientras practicaba caza del tur de Kuban, una especie de cabra montera que pesa unos 100 kilos y que habita sobre los 3.000 metros de altitud.

El empresario se encontraba de caza cuando se precipitó por un barranco con una profundidad de unos 800 metros. El cuerpo será repatriado dentro de unos días, después de realizar las gestiones burocráticas en Rusia.

Miguel Migueláñez había recogido el testigo de su padre al frente de la empresa hace 20 años. Ahora es Onésimo, de 72 años, el que se volverá a poner al frente de la compañía hasta que se designe un nuevo director general, que no será su hija Noelia.