Tras las imágenes del servicio de Urgencias del Hospital Álvaro Cunqueiro lleno de pacientes que tenían que enfrentarse a horas de espera por un pico de gripe, el Servizo Galego de Saúde (Sergas) ha querido aclarar que las Urgencias están funcionando “con absoluta normalidad”.
Aunque reconocen que el pasado 5 de diciembre tuvieron un pico asistencial en el que se atendieron 445 pacientes, sobre cien pacientes adultos más de la media diaria (342) y muchos de ellos en un plazo corto de tiempo que ralentizó los tiempos de atencion, desde el Sergas aseguran que “en ningún momento hubo colapso, no se paralizó la actividad asistencial y los pacientes fueron triados en cuanto entraban y atendidos según prioridades clínicas”.
Desde el Sergas aseguran que “los urgentes no esperaron” y que “aquellos que tuvieron un tiempo de espera más largo de lo deseado fueron los que presentaban patologías banales, en los que la demora en la atención no entraña ningún compromiso vital o riesgo de empeoramiento de la situación clínica”.
Además, recalca que el pico fue algo puntual que no se puede vincular a cuestiones estruturales o dotacionales del servicio, ya que “todos los recursos estaban operativos”: 62 profesionales de mañana, 66 de tarde y 48 de noche y “camas suficientes en las plantas de hospitalización”: a las 20.00 horas solo estaban disponibles 22 de las 30 camas de observación y 7 en la sala de ingresos.