Más sonrisas que en una campaña presidencial norteamericana. Eso es lo que se vio hoy en el despacho del alcalde cuando Abel Caballero y Julio Fernández Gayoso se estrecharon la mano antes de firmar un convenio de colaboración entre Caixanova y el Eixo Atlántico, del que Caballero es el actual presidente. Aunque la realidad es que a ninguno de los más de 20 periodistas que acudieron a cubrir la primera comparecencia pública de Gayoso tras el preacuerdo de fusión con Caixa Galicia, le interesaba gran cosa ese convenio.
Por ello todos esperaron pacientemente a que, primero el alcalde y después el presidente de la caja hablaran sobre el mismo para preguntar sobre aquello que habían ido a preguntar: la unión de las dos cajas gallegas. Lo primera era saber qué se había firmado ayer ¿una fusión, una absorción, un proyecto común, una declaración de amor financiero?, esa es la cosa, amigo Coronado, esa es la cosa…pero no hubo respuesta.
Julio Fernández Gayoso sonrió, esta vez más como Cary Grant que como un senador de Winsconsin, y tras afirmar que había “nacido una estrella”, se sacó de encima toda la presión y las otras 300 preguntas que se cernían sobre él asegurando que “desde ayer a las tres de la tarde las dos entidades hemos decidido no hacer declaraciones a ningún nivel”, por lo cual se remitió a la nota de prensa que se difundió tras cerrar el acuerdo y que, textualmente, habla de una “fusión paritaria e igualitaria” entre Caixanova y Caixa Galicia.
A lo largo del día de hoy se han conocido más datos de la misma: el número de consejeros que aporta cada entidad es el mismo,
se nombrarán dos copresidentes sin poder ejecutivo, lo cual significa que ninguno tendrá voto de calidad, habrá un director general único, previsiblemente José Luis Pego, que actualmente desempeña ese cargo en Caixanova, que será secundado por un director general adjunto, nombrado por Caixa Galicia; se establece un período de consolidación de la operación de tres años durante los cuales se establece una alternancia en la presidencia y co presidencia de la nueva entidad y se fijan dos sedes, una fiscal, en A Coruña, y otra operativa, en Vigo.