Personal del Área Sanitaria volvió a concentrarse, esta vez delante de Urgencias del Hospital Álvaro Cunqueiro para denunciar, como han hecho durante las pasadas semanas, los “recortes de personal y medios” en el área y exigir que el Servizo Galego de Saúde tome medidas.
Los representantes de los trabajadores reiteraron que la situación que se da en Urgencias no es algo puntual que se deba a los picos de gripe sino que es consecuencia, “directa”, del recorte en el número de camas, la falta de profesionales en Atención Primaria –donde hay días que carecen de médicos de familia y pediatras-y en el propio servicio de Urgencias, además de una mala planificación del propio hospital, que “obliga a profesionales y pacientes a recorrer distancias kilométricas para hacer pruebas médicas”.
Asimismo, el personal califica como “irrealizable” el “cacareado desdoblamiento de las habitaciones” del hospital puesto que “no hay camas suficiente como para levarlo a cabo”, algo que contraponen al hecho de que en el Meixoiero “siguen cerradas tres alas”.
Todos estos argumentos son negados por el Servizo Galego de Saúde (SERGAS) que, en un comunicado, ha insistido en que Urgencias está funcionando con normalidad. Sanidade recalca que se da una “respuesta adecuada” a los casos de patologías respiratorias propios de esta época del año.
A ello añade que las nuevas Urgencias del Cunqueiro tienen el doble de espacio que las antiguas de Xeral y Meixoeiro juntas y que dispone de 322 profesionales, 30 más que aquellos servicios ya desaparecidos.
EL SERGAS recuerda que el año pasado se atendieron 174.200 urgencias– 122.400 de adultos, 41.000 pediátricas y 10.800 obstétricas- de las cuales solo un 15,15% necesitaron ingreso.