El municipio holandés de Bodegraven-Reeuwijk ha comenzado a probar unos nuevos semáforos que incorporan un sistema de luces para avisar de cuando pueden cruzar la calle a aquellos que no paran de mirar el teléfono móvil. Se trata de una delgada línea de luces LEDs proyectada en la acera de los cruces de carreteras muy transitadas, para señalar a los peatones que no prestan atención si es o no es seguro cruzar.
El proyecto, denominado ‘+ Light Line’, ha sido desarrollado por la compañía holandesa HIG Traffic Systems. La línea de luz cambia de rojo a verde, y también parpadea cuando está a punto de cambiar de color, como un semáforo tradicional.
Kees Oskam, concejal del municipio, cuenta en una entrevista recogida por el diario The Guardian, que la gente está cada vez más distraída por “las redes sociales, los juegos, el WhatsApp y la música” y no presta atención al tráfico. “No podemos cambiar fácilmente esta tendencia, pero queremos anticiparnos a ella”, confiesa.
Estos semáforos han comenzado a instalarse en los cruces que se encuentran cerca de los colegio, pero la compañía espera extender la instalación si tiene éxito.