Los Cuerpos de Seguridad del Estado alertan de que no se permita entrar en casa ni se den datos por teléfono a persona alguna que se presente como empleado de una compañía eléctrica.
En las últimas semanas se han detectado robos en viviendas a personas de edad que habían dejado pasar a su vivienda a individuos que, habitualmente en pareja, se hacían pasar por personal de una compañía eléctrica que, decían, “venían a ver el lugar en el que instalar los nuevos contadores digitales”.
Estos sujetos se identifican con una factura plastificada o con una carta con el membrete de una conocida empresa de suministro eléctrico, mientras explican a los habitantes de la casa que se les va a cambiar el contador por uno nuevo y que para seguir teniendo luz deben de permitir ese cambio.
Una vez dentro de la vivienda mientras uno de ellos entretiene a los moradores con una ‘discurso’ preparado sobre el suministro, el otro registra la casa con la excusa de encontrar ‘el mejor sitio’ para ‘enganchar’ el contador, aprovechando para sustraer los objetos de valor o el dinero que encuentre.
Las autoridades advierten que “en ninguna circunstancia” es necesario que los operarios de compañía alguna entren en ninguna casa para colocar un contador y que, en todo caso, las citas con las empresas suministradoras de electricidad se realizan directamente entre el particular y la empresa, con un horario determinado y siempre se trata de personas que están debidamente identificadas y que, en cualquier caso, insisten, “no precisan entrar en los domicilios de los clientes para nada”.
