Casi 2.000 personas perdieron la vida en las aguas del mar Mediterráneo en lo que va del año, según cifras que divulgó este martes la ONU, que instó a los países a mejorar la seguridad de las rutas migratorias y a ofrecer vías legales para llegar a los países de destino.
Tres naufragios ocurridos en los últimos días elevaron el número de víctimas mortales a 1.985, una cifra vergonzosa, según datos de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y del Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados.
En total, 81.292 migrantes y refugiados llegaron a Europa por mar en 2017 y un 85 % de ellos lo hicieron por la costa italiana, un número mucho menor de llegadas que en 2016, cuando, a estas alturas de año, más de 215.000 personas lograron cruzar el Mediterráneo.
Según la Agencia de la ONU para la Migración, al menos 4.860 migrantes fueron rescatados en la costa norteafricana desde mediados de la semana pasada, 775 de ellos en tan solo un día.