El gobierno local ha puesto en marcha el plan de emergencias ante la sequía: los embalses de Eiras y Zamáns están al 48,27 y el 44,37% de su capacidad, por eso, el alcalde ha anunciado que “se suprime el suministro en bebederos y fuentes, los baldeos de calles, se reduce el riego y se incluye la prohibición de rellenado de piscinas”.
“Es el momento de ahorrar agua, es una recomendación para toda la ciudadanía. El agua es un bien precioso en esta ciudad y vamos a hacer un consumo responsable y ahorrar agua”, alentó Abel Caballero.
“Hay que utilizar las cisternas de forma responsable, arreglar posibles averías en la red por filtraciones”, ha indicado Caballero quien ha contactado ya con las alcaldesas y alcaldes cuyos concellos reciben agua de Eiras y Zamáns para que adopten las mismas restricciones.