La propuesta del ministro de Hacienda de bajar el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) los jubilados no es más que una mentira para tratar de rebajar el descontento de uno de los sectores de la población que más vota al Partido Popular.
El anuncio hecho por Cristóbal Montoro, indican los expertos, no tiene, en la práctica efecto alguno sobre la mayoría de las personas mayores de 65 años puesto que más de 6 millones de ellos, un 63% -de acuerdo con los datos del propio ministerio de Montoro, no pagan ya el IRPF dado que cobran menos de 12.000€ anuales.
La realidad es que esta medida a quienes beneficiaría, señalan técnicos de Hacianda (Gestha) es a los más ricos, “a los que además de una pensión tienen otros ingresos por rendimientos de capital o por el alquiler de inmuebles”.