Esta madrugada cambia la hora para adaptarnos al horario de verano, como sucede todos los años en marzo –y en octubre en invierno- A las 2 de la mañana de este sábado al domingo hay que adelantar los relojes una hora y ponerlos en la 3, lo que supone que dormiremos una menos y que este domingo durará 23 horas y no 24.
El cambio horario forma parte de la Directiva Europea que afecta a todos los Estados miembros de la UE y que tiene como objetivo de aprovechar mejor la luz solar por la tarde.