Este lunes pasado, agentes de la Unidad Medioambiental de Intervención Rural de la Policía Local acudieron a la Gran Vía, tras ser alertados por un ciudadano que denunció que un perro atado a la barandilla de las escaleras que bajan a Camiño Riobóo, llevaba en el lugar más de una hora a pleno sol.
Los policías verificaron que el animal se encontraba bien, que llevaba microchip, “por lo que se tuvieron acceso tanto al nombre del animal “Ron”, como al de su propietario, con el que se intentó contactar telefónicamente, sin conseguirlo; tampoco se consiguió contactar en su domicilio”.
En vista de lo anterior, indican desde el 092, el animal fue trasladado a la protectora de animales, “e independientemente se estudiarán otras acciones por si existiese un presunto delito de abandono”.
La Policía Local recuerda que “las mascotas al igual que las personas, si pasan demasiado tiempo al sol o permanecen en el interior de un vehículo en las mismas condiciones, es probable que acaben sufriendo un golpe de calor, con consecuencias graves para su salud”.