El Pleno del Concello aprobó este miércoles, con los votos de los concelleiros socialistas, la abstención de los 3 representantes de Marea de Vigo y el voto en contra de los 7 ediles del Partido Popular la reforma de la ordenanza municipal que permitirá al Concello cobrar 900.000€ en concepto de Impuesto de Bines Inmuebles –la popular ‘Contribución’- al Hospital Álvaro Cunqueiro.
El concelleiro de Facenda justificó esta medida para cumplir la norma europea que prohíbe dar ayudas públicas a empresas al tiempo que aseguró que la compañía propietaria del hospital -que incluye el edificio entre sus activos patrimoniales– declaró 3,5 millones de euros de beneficio en 2017. Además, añadió, esta empresa percibe de todos los gallegos más de 70 millones anuales hasta el fin del período de concesión.
Marea de Vigo se abstuvo en la votación argumentando por medio de su portavoz, Rubén Pérez que, si bien estaba a favor de que el hospital abone este impuesto, incluso que se exija el mismo por vía judicial, no podía compartir que se rechazasen las propuestas del BNG y de una asociación vecinal. Pérez, además, pidió que se vuelva a los tipos de IBI que había antes de la crisis y que la Iglesia también abone este impuesto por los inmuebles utilizados para el culto.
Por su parte, la presidenta del Partido Popular de Vigo anunció que su grupo votaba ‘No’ a esa reforma recalcando que lo único que pretendía la misma era “obligar” al pago de este impuesto a un hospital que el juzgado declaró de utilidad pública. Elena Muñoz enfatizó que con esta medida el objetivo que perseguía el Concello era el de intentar “robar un millón de euros” a la sanidad pública.