Juan Manuel López explicó que el Estado concede estos anticipos en función de los Presupuestos de cada ejercicio y dos años después liquida esos anticipos para ver si las cantidades adelantadas. En 2007, los anticipos se quedaron cortos, por lo que el Estado tuvo que pagar a las comunidades autónomas 6.000 millones más, pero en 2008, la cifra de liquidación será negativa llegará a los 5.700 millones de deuda que las autonomías deben reintegrar al Gobierno Central, cantidad a la que habrá que sumar más de 1.600 millones de los ayuntamientos.
Algo similar pasará en 2009, pero en este caso la suma ascenderá a 4.000 millones, deuda que aún será mayor cuando se liquide el ejercicio 2010.