Se agota el tiempo para el Celta. El club céltico llega a la quinta jornada de liga sin haber ganado ni un sólo partido y a Eusebio empieza a agotársele el crédito y a la afición la paciencia. Con el fantasma de la agonía pasada la temporada anterior, el Celta recibe mañana en Balaídos (16.00 horas) con algunas novedades al Hércules, uno de los aspirantes al ascenso a Primera División.
Los empates mantienen al equipo vigués en el puesto 18 de la tabla y necesitan con urgencia sumar los tres puntos para no alejarse del objetivo con el que arrancó en esta campaña: acabar entre los primeros puestos. Para intentar conseguirlo, el central catalán Jordi Figueras sustituirá a Noguerol en la línea defensiva y no está descartado que Vasco Fernandes recupere el puesto de lateral derecho en detrimento de Hugo Mallo.
Esperemos que los trueques traigan también aires de cambio en el marcador final.