RT informa de que el gánster retirado Anthony Raimondi, de la familia Colombo, ha confesado que ayudó a matar a Juan Pablo I.
Raimondi, alejado de la Mafia y que lucha contra un cáncer, aseguró en una entrevista que el asesinado del Papa se cometió para que no saliese a la luz un escandaloso fraude financiero.
En un libro titulado ‘When the Bullet Hits the Bone’ (Cuando la bala golpea el hueso) del que se hace eco el New york Post, Raimondi afirma que en 1978, cuando tenía 28 años de edad, fue a Italia para cometer el crimen.
La misión que le encomendaron era memorizar los hábitos del Papa. Teniendo en cuenta los mismos, sedaron a Juan Pablo I poniéndole Valium en el té. El medicamento actuó inmediatamente: el Papa quedó inconsciente. A continuación, el arzobispo Paul Marcinkus, director del Banco Vaticano, le colocó un gotero en la boca con cianuro, salió de la habitación del Pontífice y se alejó. El cadáver fue descubierto al día siguiente.
En el asesinato de Juan Pablo I, indica Raimondi estaban implicados, además de Marcinkus dos cardenales quienes decidieron matar a Albino Lucianni cuando estaba a punto de destapar un fraude financiero de más de 1.000 millones de dólares, dirigido por funcionarios del Vaticano.
La versión de Raimondi nunca podrá ser confirmada…o desmentida: al Papa nunca se le hizo la autopsia y el resto de las personas supuestamente implicadas en su asesinato ya han muerto.