La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ha denunciado este domingo que al menos 23 personas han muerto y 715 han resultado heridas tras el golpe de estado en Bolivia, después de las elecciones del pasado 20 de octubre. La Comisión habla en su cuenta de Twitter de “represión combinada de la Policía y las Fuerzas Armadas”.
El uso indiscriminado de gas lacrimógeno por las fuerzas policiales y militares en #Bolívia atentan gravemente a los estándares jurídicos internacionales. El Estado tiene el deber de respetar el derecho humano a la protesta pacífica. (4/6) pic.twitter.com/bZ7URAKJ4w
— CIDH – IACHR (@CIDH) November 16, 2019
La CIDH critica lo que califica como “uso desproporcionado” de la fuerza policial y militar y el uso de armas de fuego que, a su juicio, “deben estar excluidas de los dispositivos utilizados para el control de las protestas sociales”. Además, ha especificado que los estándares interamericanos establecen que debe limitarse “al máximo” la presencia de las Fuerzas Armadas en el control de disturbios y que el gas lacrimónego atenta “gravemente” contra los estándares jurídicos internacionales.
Con un Decreto Supremo, el gobierno de la senadora Añez legaliza la cacería. Los militares no tendrán responsabilidad penal en la represión. pic.twitter.com/K4oHaR81YK
— Martín Sivak (@sivakme) November 16, 2019