Agentes de la Policía Local detuvieron este lunes pasado a J. H. C, de Vigo, un sujeto de 55 años de edad, acusado de pegar con un palo en distintas partes del cuerpo a su pareja.
Desde el 092 informan de que pasadas las 11 de la noche de ayer fueron alertados por el 112 sobre el requerimiento de un particular que informaba desde la rúa Venezuela de que su pareja se había cortado accidentalmente una mano con un cuchillo. Al instante,la Policía recibió “una segunda llamada, de una vecina de la misma zona, que informaba del mismo incidente, indicando que se trata de un episodio de violencia de género”.
Al llegar al lugar los policías se encontraron en la calle a una pareja. “La mujer estaba sentada y se cubría el antebrazo izquierdo con un trapo de cocina que estaba ensangrentado, se mostraba muy nerviosa, llorando y pidiendo auxilio”. A su lado se encontraba el individuo que sería arrestado, el cual “presentaba síntomas de haber estado consumiendo bebidas alcohólicas y que fue invitado por los Agentes a que se apartara para poder atender a la mujer haciendo caso omiso.”
En ese momento, indican desde el 092, se presentó en el lugar una vecina, que se acercó a la mujer para auxiliarla, indicando que anteriormente “había oído una fuerte discusión entre la pareja, para acto seguido escuchar como se producía la rotura de unos cristales, añadiendo que las discusiones entre ambos son habituales”.
La víctima, M. J. R, de Vigo y 39 años de edad, manifestó que ese mismo día se encontraba en su domicilio cuando recibió la llamada de su pareja exigiéndole que lo fuese a recoger por que estaba muy ebrio, a lo que ella accedió.
Al llegar al domicilio, este le reclamó dinero -“según parece la mujer cobra una paga todos los días 25 de cada mes”- negándose ella a acceder a sus demandas, comenzando este sujeto a “insultarla pasando a empujarla para acto seguido golpearla con un palo en diversas partes del cuerpo”.
Durante el altercado, la mujer tiró un baso al suelo, recogiendo uno de los fragmentos de cristal y cortándose, lo que frenó a su pareja, momento que aprovechó ella para huir hacia las escaleras donde fue localizada, deteniéndose al encontrarse mareada, momento en el que la alcanzó el varón y realizó la primera llamada objeto de la intervención policial.