Las aglomeraciones “en época COVID” que hay en el bulevar de Gran Vía son responsabilidad del presidente de la Xunta. Eso es lo que afirmó este lunes el alcalde.
Abel Caballero aseguró que las mismas se producen alrededor de la estatua de los ‘Rederos’, “que Feijóo no nos dejó mover de ahí”. Según el alcalde, las personas que quieren llegar a las nuevas rampas subiendo desde Urzáiz, se arremolinan en las aceras “de apenas un metro de ancho” que hay a ambos lados de los ‘Rederos’.
Caballero indicó que cuando estaban haciendo la obra de las ‘rampas móviles’ “ya sabíamos que iba a pasar algo así”. Por ello, demandó al presidente de la Xunta una solución que, adelantó, podría pasar por vallar la escultura.
Trasladar los ‘Rederos’
Con respecto a la misma, el alcalde indicó que no se hizo para la Gran Vía, “fue hecha para un municipio del norte de Galicia” y acabó en Vigo. De nuevo, apostó por retirarla de ese lugar, “¡claro que hay que trasladarla!”, enfatizó Abel Caballero. Y, una vez más, apuntó al lugar donde debería estar, “en la glorieta de Isaac Peral”.
El bulevar de Gran Vía “tuvo más personas que en toda su historia“
El alcalde se mostró exultante con la aceptación de las nuevas rampas por “decenas y decenas de miles de personas...pasaron en seis días más personas por el bulevar de Gran Vía que en toda la historia de la ciudad”.
Al mismo tiempo, pese a esos miles de visitas rechazó, de plano, que pudiese haber cualquier aglomeración en las mismas. “En las rampas no hay ninguna aglomeración, absolutamente ninguna…el comportamiento de la gente ha sido ejemplar”.