El Comité de Personal de Vitrasa denuncia que la concesionaria aprovechó la excusa de la huelga para reducir líneas, frecuencias y recorridos. Los sindicatos, que hace unos días decidieron suspender “temporalmente” la huelga que habían convocado el 13 de diciembre, señalan que la empresa “consolidó” estos recortes como “horarios de Navidad”.
Beade, Fragoselo, Valladares o Teis
Desde la CIG-Vitrasa apuntan que la compañía redujo, por ejemplo, las frecuencias de los autobuses que llegaban hasta Beade, Chans, Fragoselo o Candeán. En otros casos, como las líneas de Valladares-centro (L7); Cuvi-Areal L8), Aeropuerto-Praza da Industria (L9) y Saiáns-Teis (L10), se eliminaron las partes del recorrido que eran “menos atarctivas económicamente”.
El Comité señala que, “aunque en un principio la excusa para estos recortes fue la huelga, cuando esta se suspendió la denominación de estos recortes se cambió a ‘horarios de Navidad’ manteniendo la reducción de servicios”.
Esto demuestra que es una reestructuración “basada únicamente en el ahorro de costes sin pensar en a disminución d de la calidad del servicio”.
Meses de recortes
La CIG denuncia que Vitrasa lleva meses realizando pequeños recortes, sobre todo en las frecuencias de paso de algunas líneas como las L16, L24 y C2. Esta última incluso desapareció a principio de mes como consecuencia, “indica la misma empresa” de los cortes de tráfico en el centro de Vigo.
Con conocimiento del Gobierno local
“Todo esto, lógicamente, se hizo con la aprobación del Concello de Vigo que, a pesar de no querer mediar en el conflicto entre la compañía y el personal, permite la supresión de servicios a los ciudadanos”.
Nuevas movilizaciones
Desde la central se indica que el Comité optó por desconvocar las movilizaciones, con el voto en contra de la CIG, y solicitó una mediación que permita llegar a acuerdos con la empresa, tras un año intentando negociar un convenio.
En este tiempo hubo cuatro días de huelga en agosto; 15 de paros parciales en octubre y 18 jornadas de huelga entre noviembre y diciembre.
La representación sindical muestra, así, su disposición a negociar un convenio que “está paralizado por el inmovilismo de la empresa”. Asimismo, reclamaron al Concello una mediación en el conflicto que nunca llegó a producirse.
Con todo, entienden que la subida de 5 en el precio del billete, abre un nuevo horizonte en las negociaciones y anticipan que “si no llegamos a acuerdos, retomaremos las movilizaciones cuando se reinicie del curso escolar”.