Vitrasa vuelve a asegurar que está en una situación extrema. La concesionaria del transporte público de Vigo desde hace más de 50 años, repite en una nota su argumento de los últimos meses: que se ha visto especialmente afectada por la pérdida de pasajeros durante la pandemia.
Esta circunstancia, apunta, ha llevado a la Dirección de la empresa a iniciar un “proceso de inaplicación del Convenio Colectivo” que supondrá, “entre otras cuestiones, una reducción salarial y un aumento de la jornada para los años 2022 y 2023″.
El Concello le ha pagado 19,2 millones…
La concesionaria recibe del Concello 12,6 millones anuales, a los que hay que sumar este año, 915.000€ para compensar la subida del billete hasta de 1,35 a 1,40€. Además, el Gobierno local ya pagó a la concesionaria 5.697.084,2€ por dos conceptos: la compensación por las pérdidas ocasionadas por el COVID y parte del ‘reequilibrio financiero’ por la el descenso del número de pasajeros entre marzo y agosto de 2021.
…pero Vitrasa reclama otros 16 millones más
Esos importes, sin embargo, no son suficientes para Vitrasa. En concreto, a mayores, la concesionaria estima que el Concello le debe 15.710.135,27€ más: en compensación por las pérdidas ocasionadas por el COVID y como segunda parte de ese ‘reequilibrio financiero’ por la bajada de viajeros.
El Gobierno local ha beneficiado siempre a la concesionaria
Además, el Gobierno local ha beneficiado a la empresa con otras medidas, como la prórroga de la concesión hasta 2025, en contra de lo anunciado por el alcalde; la aprobación de servicios mínimos ilegales durante la última huelga o la reducción de algunas líneas o frecuencias; el nulo control de los aforos de los autobuses durante la pandemia; la denuncia de los trabajadores sobre la falta de supervisión de la concesión o el hecho de que durante el conflicto con la empresa, el alcalde se negase a recibirlos.
Caballero culpa a la Xunta de la mala situación de la compañía
El pasado 18 de noviembre, cuando Vitrasa ya adelantaba en una nota que estaba en una situación de “extrema dificultad económica”, Abel Caballero aseguró que conocía esta circunstancia y culpó a la Xunta de ella.
Caballero recordó que Vitrasa recibió una indemnización pagada desde el Gobierno de España y recalcó que nunca compartió las «limitaciones de aforo [en los autobuses] que se impusieron a Vigo [desde la Xunta] en momentos en los que no teníamos ya prácticamente pandemia».
«Veremos que postura tomamos en la ciudad porque la Xunta de Galicia decretó unos aforos en los autobuses de Vigo que no compartíamos«. Esas limitaciones, añadió el alcalde, produjeron problemas de movilidad «y un daño económico a la empresa» y, recalcó, «falta por ver quién tiene que pagar eso…falta por ver si eso no lo tiene que pagar quien impone la prohibición».
Un recorte de sueldos del 40%
Los sindicatos denuncian que la intención de la concesionaria no es otro que rebajar los salarios de sus empleados en un 40% este año y, por lo menos, un 14% el que viene. “Todo ello, basándose en una hipotética bajada de ingresos en ese tiempo”.
Y un aumento de la jornada en 86 horas
Al mismo tiempo, advierten desde el Comité de Empresa, en estos dos años aumentarían la jornada anual en 86 horas. A ello se añade, la “modificación sustancial de la dinámica de trabajo, flexibilizando la jornada a su antojo“. Además, de no entregar parte del uniforme de invierno.
Menos líneas, menos viajes y menos autobuses
Para los sindicatos es “curioso” que Vitrasa justifique sus pérdidas con la reducción de pasajeros cuando “realiza recortes en las líneas”.
Exactamente, añaden, “a día de hoy dejaron de realizarse más de 70 viajes diarios, aumentando el intervalo de paso entre autobuses”. Además, “hay más de 25 vehículos parados en las cocheras”.
Que deje la concesión
Para el Comité de Empresa estas medidas anunciadas por Vitrasa son “un atraco a los trabajadores que no vamos a tolerar”. Por ello, piden a Vitrasa que deje la concesión, puesto que “no es de recibo pretender recuperar las pérdidas robando a sus trabajadores”.