Pablo Beiro es la primera persona con movilidad reducida que llega a concelleiro
Ocho horas con referencias a la casas del secretario general del PSdG, Pachi Vázquez, a Santo Tomás, la ministra de Economía, Fernando VII o el cantante Michael Jackson, eso duró el Pleno del Concello. La reunión de la Corporación, en la que se estrenó el concejal popular Pablo Beiro, prometía con batir el récord de la última y lo consiguió. Desde las 9 de la mañana los concejales debatieron sobre la reducción de tasas e impuestos, la moción popular para la adopción de un Plan de Austeridad, el plan de modernización de colegios públicos y comedores escolares o la financiación municipal por parte del Ministerio de Economía.
Tasas e impuestos
La parte más interesante de las 8 horas, en las que el alcalde aprovechó la ausencia del portavoz del grupo PP, Chema Figueroa, para perderse alguna votación, fue el debate sobre el descenso de un 0,6% de los impuestos que pagarán este año los vecinos tras la aplicación del índice corrector del IPC, referido a mayo. Mientras el gobierno defendía que las tasas habían bajado, los populares señalaron que el gobierno bipartito las había en los últimos años más que ningún otro en la democracia. Además achacaron al alcalde que hablase de que su gestión había creado una buena gestión económica cuando recibió más de 60 millones de superhábit de su antecesora, Corina Porro.
El alcalde se pierde la primera votación
A las cinco menos cinco de la tarde, la mayoría de los concejales, que aún no habían comido, se habían levantado en varias ocasiones y se apresuraban a volver al salón para asistir a las votaciones, que en la penúltima moción fue resuelta en contra con el voto de calidad del presidente, en este caso el teniente de alcalde, Santiago Domínguez Olveira.
El detalle final lo pusieron Antonio Coello, quien calculó que en todo el año “sólo destinamos 100 horas a sentarnos en los plenos” y se mostró dispuesto a quedarse, “hasta última hora de la tarde si es preciso”, y el concejal de Tráfico, Xulio Calviño, quienes se declararon cariño mutuo.
El alcalde puso punto final a la sesión recordando que le dedica al Concello 365 días al año “non collo vacacións”, pidió que se acabe de redactar el reglamento , lamentó que no hagan una pausa para comer y recordó, en referencia al portavoz popular que “eu estou aquí”.
