El HALO funcionará la primera quincena de febrero. Acaba de anunciarlo el alcalde. Se concluirán, así, las obras iniciadas el 22 de agosto de 2022. Los usuarios del nuevo ascensor podrán subir -y bajar- desde Serafín Avendaño, en la zona de García Barbón próxima al Club Financiero, hasta Vía Norte.
15 pisos de altura
En concreto, el ascensor ‘Halo’ salvará 45 metros de altura -unos 15 pisos- con dos ascensores que dejarán a sus ‘pasajeros’ en el círculo superior, que tendrá una mitad abierta, creando un mirador, y otra cerrada. Ambas estarán a la altura de Vialia y de las estaciones de Urzáiz -la de tren y la de autobuses-. Además, permitirá poner en contacto dos zonas la ciudad en las que viven entre 50.000 y 60.000 habitantes.
Ecológico
El doble ascensor es “ecológico”,gracias a sus aerogeneradores que se encargarán de proporcionar la fuerza necesaria para su funcionamiento, con un “consumo nulo de energía”. Cada uno de ellos tendrá capacidad para 17 personas -34 en total- y “tardarán menos de un minuto” conectar ambas partes de la ciudad.
Un incremento de costes del 118%
Como hemos informado en vigoalminuto, el coste de esta obra ha ido aumentando paulatinamente. Así, de los 7,2 millones anunciados por el alcalde en mayo de 2021 subió, primero, a 12,6 y finalmente a 15,8 millones- de los que Europa aporta más de 6- lo que significa un incremento del 118%.
Finalmente, el pasado 16 de octubre, el Gobierno local propuso una nueva inyección de 3,2 millones al proyecto. Esa cantidad la asumirá el Concello en dos años: 1,2 millones ya se imputaron en el presupuesto de este 2023 y el suplemento de los otros 2 millones incluido en las cuentas para 2024.
¿Cuáles son las causas de ese aumento?
En un primer momento, el alcalde justificó esta desviación de la inversión sobre el presupuesto inicial con dos argumentos: en primer lugar a la diferencia que suele haber entre lo estimado en el concurso de ideas y el proyecto real y, segundo, a causa de un «incremento, muy importante, del precio del acero y del vidrio».
Posteriormente, se conoció la necesidad de instalar en el ascensor HALO un nuevo sistema de renovación del aire en las dos cabinas del ascensor. También ha habido que completar el sistema de seguridad.
Asimismo, se han incoporado partes construidas a partir de materiales más resistentes, que no existían al redactar el proyecto; se ha mejorado la sujeción de las enormes piezas de vidrio que recubren la plataforma círcular. Por último, el Concello ha tenido que asumir el coste de los daños que la obra del HALO ha causado a parte del pavimento de la autopista y a varios elementos del acceso a la nueva Estación de Autobuses.