Hugo Chávez no se fía de Álvaro Uribe, así que no asistirá a la investidura de Juan Manuel Santos, presidente electo de Colombia. El motivo: teme por su vida tras denunciar la supuesta presencia de jefes guerrilleros en Venezuela. Por eso amenaza con romper relaciones con el país vecino en las próximas horas, al menos hasta que Santos ejerza oficialmente el próximo 7 de agosto.
En un discurso en el que calificó a Uribe de “mafioso”, Chávez arremetió contra el antiguo Gobierno del colombiano porque “está lleno de odio, fracasó en el empeño que ha venido asumiendo a nivel mundial, apoyado por el imperio yanqui, de aislar a Venezuela”. Y tampoco tiene muy claro que el nuevo presidente cambie de forma de actuar, ya que es un ex ministro de Defensa de Uribe hasta hace poco crítico acérrimo del Gobierno de Chávez.