Agentes de la Policía Nacional, en una operación conjunta con Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria y la Policía Judiciária portuguesa, han intervenido más de 1.000 kilos de cocaína en Portugal y España– casi la mitad de ellos en 21 palets de melones, en Vigo.
Según informa la Policía Nacional, tres personas están detenidas en territorio portugués y la investigación continúa abierta en España. El estupefaciente, procedente de Sudamérica, se interceptó en dos envíos: una partida oculta en envases de zumos y la otra en el mencionado cargamento de melones.
Investigación
La investigación se inició por parte de la Policía Judiciária de Portugal en los últimos meses, tras tener conocimiento de la existencia de una organización que introducía grandes cantidades de cocaína procedente de Sudamérica. Las pesquisas realizadas permitieron la intervención, el puerto luso de Sines, de un cargamento de 535 kilos de cocaína que venía oculta en el interior de envases de zumos.
Asimismo, se confirmó que la organización criminal utilizaba eficaces métodos de ocultación de la sustancia estupefaciente para introducirla en territorio europeo y, que a su vez, podría estar utilizando puertos españoles para sus operaciones.
Con las informaciones aportadas por las autoridades portuguesas, agentes de de la Policía Nacional y de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria, iniciaron las investigaciones en territorio español para detectar las actividades de la organización en nuestro país. De esta manera, se detectó que podría encontrarse en marcha otro envío del estupefaciente con destino a un puerto gallego.
Melones sin pulpa rellenos de cocaína
Los agentes detectaron en Vigo un contenedor de fruta, procedente de Brasil, que podría estar relacionado con la organización. Tras su localización e inspección, se localizó en el interior un total de 21 palets de melones sin pulpa, previamente vaciados por la organización y que habían sido rellenados por la organización con bolsas esféricas de goma que contenían un total de 490 kilos de cocaína. La investigación continúa abierta y no se descartan nuevas detenciones.