No hubo suerte. La segunda batida de voluntarios en busca de alguna pista sobre la pontevedresa Sonia Iglesias no ha dado frutos. Unas 200 personas recorrieron hoy los montes de Verducido, pero lo único que se encontró fue, como el domingo pasado, algunas prendas de ropa que en principio nada tienen que ver con el caso. Además, en esta ocasión 7 buzos de los GEO peinaron el embalse de Pontillón do Castro, sobre todo por la zona de la pared de contención, con una profundidad de cerca de 25 metros.
La niebla de primeras horas de la mañana dificultó la labor de los voluntarios, divididos en cuatro grupos de entre 30 y 40 personas a los que se sumaron jinetes a caballo y conductores a bordo de quads. Los rastreos se retomarán el martes por la tarde en la Xunqueira de O Vao, donde apareció la cartera de Sonia.