Por ello, hoy, además de boicotear a estas marcas en los supermercados de Compostela, han exigido al Gobierno, pegando carteles y entregando octavillas, haciendo declaraciones e informando al público, que “tome nota” del “ninguneo” de las industrias lácteas que “están liderando la destrucción” del sector.
Es la tercera jornada de boicot a estas marcas los tres sindicatos han pedido al Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, que dirige la gallega Elena Espinosa, que apruebe una ley que fije un precio mínimo para la leche si no quiere acabar con esta fuerza productiva, al tiempo que acusaron alas mencionadas marcas de engañar al público y de buscar la ruina de los miles de personas que viven del ganado en la comunidad.