Tres años después de a muerte de Isaac Pérez Treviño y Julio Anderson Luciano, sus muertes siguen en los juzgados. El Tribunal Superior de Xustiza de Galicia celebrará mañana la vista por los recursos de apelación de acusación particular, Fiscalía y defensa del caso del crimen de la calle Oporto ante la sentencia dictada por un jurado popular que absolvía al único acusado, Jacobo Piñeiro, de los delitos de asesinato y sólo lo condenaba por incendio a 20 años de cárcel.
Las acusaciones, particular y pública, pedirán la nulidad de la sentencia al considerar que el jurado entró en una contradicción evidente en los argumentos que utilizó para justificar sus conclusiones, ya que consideraba que Jacobo dio 57 puñaladas a las víctimas en defensa propia en un caso y movido por un miedo insuperable a sufrir una agresión sexual en otra. Por este motivo, pedirán la celebración de un nuevo juicio con un tribunal profesional (para la acusación particular) o con un nuevo jurado (para la Fiscalía).
Mientras, la defensa solicitará que la pena por delito de incendio se rebaje de 20 a 10 años, ya que las dos décadas es la pena máxima por este delito.
Los sucesos ocurrieron el pasado 13 de julio de 2006 en el piso que las víctimas compartían en la calle Oporto y donde el condenado las agredió con un arma blanca para después prender fuego al piso y huir con una maleta en la que llevaba varios objetos sustraídos a las víctimas. El juicio se celebró este año en Vigo y el veredicto absolutorio del doble asesinato de los dos jóvenes generó mucha polémica entre los sectores homosexuales, al considerar la sentencia homofóbica.