La fortuna quiso que el avión se partiera al estrellarse pero no explotara, lo que salvó la vida a cerca de 36 personas, aunque no evitó que otras 15 murieran en el siniestro. Comienzan a saberse datos acerca del accidente de avión que ayer se estrellaba en Ciudad Guayaba, en Venezuela, a apenas 10 kilómetros del lugar en el que debía de aterrizar: el piloto alertó que algo no iba bien en los controles de la nave justo antes de precipitarse a tierra.
El avión, de la compañía Conviasa, cayó cerca de las instalaciones de la siderúrgica estatal Sidor, por lo que en un primer momento los trabajadores fueron los que ejercieron las labores de rescate mientras no llegaban las autoridades, alguno incluso tuvo que ser hospitalizado por inhalar gran cantidad de humo. El Gobierno de Chávez ya ha decretado 3 días de luto nacional en honor de las víctimas.
Y mientras trabajan en la búsqueda de las cajas negras del avión, expertos de la empresa francesa fabricante de la aeronave se han desplazado hasta Venezuela para ayudar en la investigación.
