Pedían millones de dólares por la explotación de alguno de los discos míticos de Bob Marley, pero se ha llevado una sorpresa. Un juez de Nueva York ha declarado que Universal Musica Group es la legítima dueña del copyright de los cinco álbumes que el cantante de reggae jamaicano grabó entre 1973 y 1977 para Island Records, y no su familia, como reclamaban su viuda y sus nueve hijos.
La familia acusa a la compañía de retener los derechos de autor de Fiftu-Six Hope Road Music, de la que son propietarios, y de ignorar un acuerdo de hace 15 años por el que se les daban los derechos de ‘Catch a Fire’, ‘Burnin’, ‘Natty Dread’, ‘Rastaman Vibration’ y ‘Exodus’, que incluyen algunas de las canciones más conocidas de Marley, como ‘No Woman, No Cry’ o ‘One Love’.
Una batalla en la que también se incluían los derechos para los tonos de móviles de las compañías AT&T, Sprint y T-Mobile, entre otros, y que el juez considera que pertenecen a la discográfica según las leyes estadounidenses.