La decisión la han tomado los presidentes de los grupos parlamentarios europeos a propuesta del Partido Popular Europeo y el grupo Conservadores y Reformistas Europeos, al considerar que la lucha de este periodista y psicólodo “es y seguirá siendo un ejemplo para todas las personas que luchan por las libertades y la democracia”.
La última huelga de hambre iniciada por el disidente la emprendió en febrero la tras la muerte de Orlando Zapata; en esta ocasión, tras 135 sin ingerir alimentos, Fariñas estuvo a punto de morir y sufre graves secuelas de las que no se ha recuperado a día de hoy. El opositor depuso la misma tras el anuncio de la liberación de 52 presos políticos después de la mediación de la Iglesia y el hasta ahora ministro de Asuntos Exteriores de España, Miguel Ángel Moratinos.