Pagará con su vida su participación en la dictadura de Sadam Hussein. Tareq Aziz, el último viceprimer ministro de Sadam y, durante muchos años, ministro de Asuntos Exteriores de Irak, ha sido condenado a muerte por el Alto Tribunal iraquí.
El tribunal ha considerado probado que Aziz participó en la persecución de miembros del partido y de la comunidad chií, y que es uno de los responsables del asesinato de centenares de ellos por parte del régimen dictatorial que gobernó aquel país durante décadas. Aziz, considerado por muchos la mano derecha de Sadam, aprobó, además, la invasión de Kuwait y fue uno de los artífices de la Guerra del Golfo, que se libró en 1991. El ex canciller seguirá la suerte de su jefe, que fue ejecutado por los crímenes que cometió, alentó y ordenó durante su mandato.