El objetivo es claro: captar al público gallego. Portugal se ha convertido hoy en el protagonista indiscutible de la jornada en la XIII Edición de Expogalaecia, que gracias al mal tiempo está recibiendo a miles de personas, con lo que se espera que se llegará a los 60.000 visitantes, superando los 20.000 de la anterior edición de Expogalaecia y los 32.000 de Vigoferia.
Con cerca de una veintena de expositores, los portugueses están sorteando estancias de fin de semana en hoteles y casas rurales y tratamientos de belleza en centros de talasoterapia lusos.
Acompañado por la música de la asociación cultural de las Termas de Carvalhal, de la Beira Alta lusa, los visitantes pudieron degustar productos gastronómicos típicos de las regiones de Coimbra, Tondela y Penafiel, como los encantos de Mondego, los choupalinhos, arrufadas, cabrito asado, dulces y licores, además de disfrutar de las muestras de artesanía, desfiles de gaiteiros y actuaciones musicales.
Desembarco del mueble portugués
Por su parte, el XVII Salón del Mueble, Vigoferia, los comercializadores y distribuidores de muebles lusos llegan en su mayoría de Paços de Ferreira, considerada la capital del mueble en Portugal, así como de Sacavém, Lousada y Paredes. En los stands se combinan tradición clásica del mueble trabajado en madera maciza con propuestas de diseño con acabados en piedra, mobiliario asiático y de estilo rústico.
