Pero el hombre tuvo mala suerte, ya que la Policía, tras el aviso del dueño del vuelco picapedrero, encontró el motor nuevo cuando estaba preparado para ser instalado… ¡en otro coche!
Pero el hombre tuvo mala suerte, ya que la Policía, tras el aviso del dueño del vuelco picapedrero, encontró el motor nuevo cuando estaba preparado para ser instalado… ¡en otro coche!