Como suele ser tónica habitual esta campaña, el Amfiv empezó el partido frío, cometiendo numerosos errores en el lanzamiento durante el primer cuarto. Pero en esta ocasión la novedad fue que no se erraba sólo en tiros cómodos desde debajo del aro sino que los vigueses tampoco estaban acertados en sus intentos de media y larga distancia. Por eso, el resultado a la conclusión de los primeros diez minutos era favorable al CID Casa Murcia Getafe (13-6).
César Iglesias intentó que su equipo se reenganchase al encuentro apostando por una zona presionante pero la variante táctica tardó en dar los frutos esperados. La tensión y los nervios se notaban demasiado en ambos conjunto y eso se reflejaba en la pobre anotación al llegar al descanso. Tras la reanudación del choque, el Amfiv continuó trabajando para seguir reduciendo su desventaja en el marcador y, a pesar de los enormes problemas que los vigueses tuvieron con su rebote defensivo, todo estaba aún por decidirse a la conclusión del tercer periodo (36-34).
Los madrileños, liderados por Turek, veían cómo su renta se esfumaba y el encuentro se igualaba al máximo. Estaba claro que la victoria se la iba a llevar el conjunto que supiese mantener la cabeza más fría y acertar en los momentos oportunos. Y en ese tipo de batallas a cara o cruz, el Aldasa no suele tener excesiva suerte. Con cuatro puntos abajo en el último minuto, los vigueses intentaron robar un balón con su zona presionante pero la acción no produjo el efecto deseado y el Getafe anotó una canasta fácil. Por si fuera poco, en la siguiente acción ofensiva de los locales, el conjunto de César Iglesias intentó hacer falta para que no corriese el reloj, con la mala fortuna de que la acción acabó en canasta más adicional para un Casa Murcia Getafe que sellaba así su victoria (50-42).
