Aún no ha terminado el año y Caixanova ya ha superado los 2.100 millones de euros en los préstamos concedidos a empresas, por lo que espera cerrar 2009 con casi 3.000 millones invertidos en financiar distintas entidades. Este es uno de los datos que cerca del millar de empleados de la Red Comercial de Vigo de la entidad conocieron en una de sus habituales reuniones informativas, en la que estuvieron presentes el presidente y el director general, Julio Fernández Gayoso y José Luis Pego.
En pleno año de crisis, sólo a través de las líneas de financiación del Igape y del ICO, Caixanova dio liquidez a 3.250 empresas. Una cifra que aumentará en los próximos meses con el ‘Plan Re-Brote’, pensado para financiar a empresas mediante cuentas de crédito de entre 300.000y 3,5 millones de euros a financiar en dos años, y el ‘Plan Re-Solve‘, para microempresas y autónomos con cantidades entre los 3.000 y 40.000 euros. Ambos estarán dirigidos a la financiación de circulante, adelanto de efectos comerciales y facturas y gestión de pago a proveedores.
La extrema prudencia con la que ha obrado la caja y los buenos resultados de los planes de actuación iniciados a principios de año le sirve a Caixanova para afrontar la crisis con un coeficiente de solvencia del 11,84 por ciento, 76 centésimas por encima del registrado en 2008. Además, se sigue conteniendo la tasa de morosidad que, con un 4,64%, se sitúa 54 centésimas por debajo de la media del sector, y dispone de un fondo de insolvencias de más de 626 millones de euros y otro de previsiones generales de 85 millones que permitiría cubrir las pérdidas en la cartera de títulos en caso de una mala evolución en los mercados.
Hasta agosto, Caixanova tuvo un resultado antes de impuestos de 75,2 millones de euros, con un volumen de negocio de 43.000 millones de euros, lo que la convierte en la novena caja de ahorros por volumen de activos.
