Tenía 49 años y, junto a ella, murió su hijo, de 16. Ana María Sánchez-Vizcaíno se ha convertido en la primera víctima mortal de la violencia de género de 2011. Su marido, de 52 años, le disparó varios tiros con un rifle antes de suicidarse con una carabina en la localidad segoviana de Torrecaballeros. Entre la pareja, en trámites de separación, no constaban denuncias por malos tratos, aunque él sí tenía permisos de armas.
Los cuerpos fueron descubiertos por agentes de la Guardia Civil, que acudió al domicilio del matrimonio al denunciar la familia que llevaba varios días sin poder comunicarse con ellos.
Esta sería la primera víctima de un contador que el año pasado llegó hasta las 71 mujeres y que se cobró su primera muerte a los tres días de arrancar el año.