Ni una sola nueva edificación que no piense en el coche del futuro. El nuevo decreto de movilidad de la Xunta, a exposición pública desde este viernes, contempla que todas los nueves inmuebles deben tener puntos de recarga para vehículos eléctricos, además de reservar en todos los planteamientos urbanísticos suelo para la implantación de este tipo de infraestructuras. El decreto, pionero en España, implicará la modificación de las normas del hábitat y define nuevas tecnologías para edificios de viviendas, aparcamientos públicos y garajes.
A pesar de que aún hay pocos coches eléctricos circulando por las carreteras gallegas, se estima que será el vehículo del futuro, por lo que todas las localidades con entre 50.000 y 150.000 habitantes deberán contar con al menos una electrolinera. En el caso de ciudades mayores el límite mínimo es de dos estaciones de recarga. Además, la Xunta establecerá un registro público de estaciones de carga y de empresas gestoras.
