La pelea por que Vigo tenga un centro de emergencia social adecuado a las necesidades de la ciudad parece estar cerca de acabarse. La Xunta de ha firmado un convenio dotado con 200.000 € anuales, para que el albergue Xoan XXIII, de la Misioneras del Silencio, acoja a los sin techo. Los indigentes tendrán 50 camas a su disposición (que se ampliarán a 20 más en diciembre), 15 duchas, lavandería, cafetería y sala de ocio.
La delegada de la Xunta en Vigo y la secretaria Xeral de Familia e Igualdade indicaron que habrá un servicio de transeúntes y se habilitará el comedor social de Urzáiz para entre 115 y 120 comensales. Ambos lugares estarán atendidos por personal cualificado: director y subdirector, psicólogo, camareros, vigilantes de seguridad y siete personas de servicio y cocina. El funcionamiento de este servicio, que se establece con una duracion de un año, será seguido por una comisión técnica que evaluará l necesidad de ampliar las plazas o las prestaciones en cada momento.
La ‘Gota de leche’ no está en condiciones
Susana López Abella aclaró que la Xunta ha asumido la solución a un problema que no es de su competencia,”vista la imposibilidad de llegar a un acuerdo en el seno del propio gobierno de la ciudad de Vigo y porque no podía demorarse más ante la llegada del invierno”. La secretaria xeral aseguró que, en contra de lo que había anunciado la anterior Vicepresidencia de Igualdade de la Xunta, “la Gota de Leche no cumple ningún requisito para ser albergue. Sólo se ha instalado un ascensor y adecuado un comedor pequeño, pero no dispone de camas, cocina, enseres, ni mobiliario, además, los tecnicos han constatado en un informe que en su estado la apertura de un albergue es inviable”.
Hece cinco meses, la responsable de Benestar del gobierno bipartito de la Xunta anuncio que el edificio había sido reformado para adecuarla a albergue. Manifestó que en el antiguo gimnasio del inmueble ya había un comedor social con 44 plazas nuevo, que se habían creado aseos y vestuarios, tres salas, una zona común y una sala polivalente, pero que no disponía de camas ni de otros servicios.
Sin embargo, esta reforma no sería suficiente para cumplir los requisitos de un centro de inclusión y emergencia social, según la Orden de enero de 2008 de Vicepresidencia.
Tampoco será para la Policía Local
Desde entonces se ha mantenido un debate continuo sobre el destino final del inmueble, reclamado por el alcalde de Vigo Abel Caballero para que formara parte de la ciudad administrativa de Moneo y por los agentes como futura jefatura de la Policía Local. Esta última opción ya ha sido totalmente descartada hoy, así como la posibildad de una permuta con la Escuela de Hostelería “legalmente no es posible debido a la diferencia de valor de ambos inmuebles, el edificio de la Gota de Leche ha sido tasado en más de 3 millones de euros por Patrimonio de la Xunta, mientras que la Escuela de Hostelería tiene un valor de 900.000 €, incluyendo el bajo comercial”.