Sin dar detalles sobre las detenciones ni sobre los detenidos, pero Irán ha anunciado que ha arrestado a 30 espías que trabajaban para Estados Unidos en una importante red que operaba en los Emiratos Árabes, Malasia y Turquía sobre todo para reunir información sobre los científicos y universitarios iraníes y cualquier investigación relacionada con actividades nucleares, aeronáuticas, de defensa o biotecnología.
En un comunicado emitido por la televisión pública, el Gobierno iraní aseguraba que estos espías eran captados por Estados Unidos a cambio de permisos de residencia, visados o trabajos en el país.