Además, tendrá tratamiento vitalicio de ‘Molt Honorable Senyor‘.Así lo establece el Estatuto de los ex Presidentes de la Generalitat, aprobado en 2002, que contempla que los jefes del Consell, en sus desplazamientos fuera del territorio de la Comunidad Valenciana, podrán gozar del apoyo de los servicios que la Generalitat tenga establecidos, como las oficinas del Consell en Madrid y Bruselas, y “de aquellos otros de similar naturaleza que existan o que en el futuro pudieran establecerse“.
Por si esto fuese poco, los presidentes pueden ostentar, desde el momento en que se produce su cese, la condición de miembros permanentes del Consell Jurídic Consultiu de la Comunidad Valenciana, con su correspondiente sueldo.