El Gobierno sirio sigue masacrando a su población. Según varias agencias internacionales, los tanques del Ejército del dictador Bashar al Assad, siguen bombardeando Hana, la cuarta ciudad más poblada del país, para reprimir las protestas contra el régimen. Varias ONG han informado de que los ataques se han dirigido contra un grupo de personas que intentaba manifestarse contra el gobierno, en el barrio de Lamein, tras los rezos del segundo día del Ramadán.
Los soldados también han bombardeado Rubaii, Baath y Al Hamidiya, en la zona este de la ciudad, y la carretera del norte que conecta Hama con Aleppo. Aunque la autoridades no han dado dato alguno sobre las posible bajas entre la población civil, activistas de derechos humanos presentes en Hana aseguran que, al menos, hay cinco muertos y varias decenas de heridos.