Sabemos que Vigo ha vivido una noche en la que parecía que se acababa el mundo, pero ahora los datos lo corroboran. La tromba de agua de ayer fue tan tremenda que se recogieron 82 litros por hora durante 3 horas y media, llegando en algún punto concreto del término municipal hasta los 110 litros por hora, pero de manera más aislada.
Ha sido el alcalde de Vigo, Abel Caballero, el que ha comparecido a media mañana con varios folios en la mano y ha relatado la intensidad no sólo de la noche, sino de las primeras horas del día hoy. La tormenta que padeció anoche Vigo fue “severa” y, en opinión del regidor, la alerta naranja declarada desde la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) más se pareció a una roja en toda regla.
A estas horas de la mañana todo el tráfico de la ciudad se ha restablecido, excepto la confluencia entre de las calles Colón y Marqués de Valladares, en donde el pavimento y la calzada -como mostramos en la imagen de esta noticia- han quedado gravemente dañados.
35 agentes de la Policía Local, 22 de los Bomberos, 11 de Protección Civil y 20 operarios de limpieza tuvieron que emplearse a fondo con las incidencias registradas toda la noche, pero, sobre todo, entre las 22 horas y la 1 de la madrugada. También arrimaron el hombro agentes del Cuerpo Nacional de Policía de la Comisaría de Vigo.
La Policía Local llegó a contabilizar hasta 35 intervenciones y los Bomberos hasta otras 18. La mayoría de ellas, inundaciones de bajos, ascensores parados con personas dentro y rescate en vehículos atrapados por la lluvia.
Lo más grave se vivió en el túnel del Berbés, en donde dos coches quedaron atrapados por la lluvia y los conductores y sus ocupantes tuvieron que ser rescatados. Los vehículos en los que viajaban quedaron anegados por el agua y no pudieron ser retirados hasta primera hora de la mañana.
También quedaron atrapados unas personas de edad avanzada en otro coche cuando circulaban por la calle Arquitectos Palacios a eso de las 24 horas. Fueron ayudados a salir del interior sin mayores problemas.
En la calle Marqués de Valladares con el cruce de Colón que, sin duda, ha sido la más afectada incluso la alarma llegó a más cuando en plena tromba de agua comenzó a oler a gasoil. El alcalde ha explicado que, pese a la preocupación del principio, finalmente, los bomberos no vieron peligro en esa fuga.
Caballero no quiso dejar pasar la oportunidad para preguntarse por qué siempre que hay lluvias fuertes en la ciudad la calle Marqués de Valladares es una de las más afectadas. Aunque no ha querido entrar en polémicas por ser el Gobierno municipal de la popular Corina Porro el que llevó a cabo esa humanización, el regidor socialista ha avanzado que el Ayuntamiento ya está estudiando la situación para tratar de llegar a una solución duradera.
Las calles Coruña y Julián Estévez sufrieron cortes de tráfico importantes y en lugares como Eduardo Cabello, en Bouzas, el nivel del agua llegó hasta los 75 centímetros.
Inundaciones por lo largo y ancho de Vigo, en Rosalía de Castro, los parking de la Plaza de la Estrella y de Urzáiz, y daños en locales particulares de López Mora. También hubo que rescatar a personas de ascensores y se han inspeccionado las Islas Cíes para comprobar que todo está correcto.
La tromba de agua de Vigo también afectó a unas 15.000 viviendas que sufrieron cortes en el suministro eléctrico. Sobre las 00:30 horas 7.000 de ellas volvieron a tener luz, mientras que las 8.000 restantes no pudieron tenerla hasta esta misma mañana.
Los cortes eléctricos se cebaron en zonas como Bouzas, la Plaza de Industria, Plaza América, Gran Vía, López Mora, Ecuador o en el entorno del hotel Bahía de Vigo.
Caballero felicitó públicamente la labor desempeñada toda la noche y parte del día de hoy a los efectivos desplegados por las distintas zonas de la ciudad.