La renuncia del confundador de Apple, Steve Jobs, ha provocado una caída inmediata de sus acciones, llegando al 7% de bajada en operaciones electrónicas.
Su dimisión, que llega después de haberse sometido a una operación en la que llegaron a transplantarle un hígado, ha sido un tanto sorpresiva y pone fin a 14 años al frente del gigante tecnológico. Será reemplazado en el cargo por su segundo al mando, Tim Cook.
Los que entienden de esto aseguran que la salida de Steve Jobs no echará al traste el cronograma de producción y lanzamiento de aparatos de la compañía, incluido un posible nuevo iPhone en septiembre y una tercera generación de ‘tablet’ iPad en el 2012.
El ejecutivo de 55 años interrumpió su baja médica y reapareció brevemente en público en marzo de este año para la presentación de la nueva versión del iPad.