Se trata de una propuesta de Bruselas que pretende materializarla este próximo martes. La Comisión Europea pretende que se prohíba a las agencias de rating que publiquen sus notas de calificación de aquellos países de la UE que estén en crisis.
Es decir, que no se diga ninguna nota de países rescatados como Grecia, Irlanda o Portugal, pero tampoco de aquellos que en la actualidad estén negociando planes de ayuda internacional.
Con la propuesta, Bruselas quiere aumentar el control sobre dichas agencias y, sobre todo, después de que numerosos líderes europeos estén convencidos de que esas notas de calificación no hacen otra cosa que agravar las crisis.
Asimismo, la Comisión Europea pedirá que las agencias de rating avisen con antelación a un país si planean rebajarle la nota de su deuda pública para darle una última oportunidad de presentar alegaciones.