La concelleira popular Elvira Larriba consideró precipitada, agresiva y despilfarradora la actuación del Concello en el Casco Vello. Larriba aseguró que hay una clara ausencia de planificación, “una chapuza” y una improvisación”.A su juicio falta un estudio previo, hay constantes revisiones o levantado de las obras, como en el caso de la Porta do Sol y han aumentado las barreras arquitectónicas “al haberse aumentado el nivel de la pendiente de varias calles”, como en la zona alta de la Herrería.
También adolece de una mala planificación en la red de servicios, falta una inspección, no hay un seguimiento técnico de las obras y “son los vecinos que se quejan de que sólo pueden hablar con los ecargados de ellas”; no hay certificado de origen de la piedra, “no sabemos si es extremeña, como en Abrir Vigo al Mar, o gallega” tampoco se han colocado contenedores soterrados pese a que el el proyecto estaban previstas islas ecológicas que irían bajo el nivel de la calle.
“Es una intervención agresiva ya que ignora estudios hechos sobre la misma“, como los elaborados por el Plan Urban. “Se ha hecho tabla rasa: el alicatado es el mismo en todas las calles”. Se ha despreciado la piedra antigua, que era recuperable y estaba en buen estado, se han sustituido las aceras de losas grandes de granito por otras de placas. No han intervenido canteros, como se hizo en la últimas rehabilitaciones. El granito gris alba no es acorde con los edificios del barrio, incluyendo en , varios casos, hasta el rosa Porriño.
Larriba cree que es un “cante” la puesta de losas centenarias a la entrada de algunas casas “a modo de felpudo“, como en la rúa Poboadores, algo que no se ha pactado ni consensuado con los vecinos; “no nos consta reuniones para hablar de estos temas”, como se pone de manifiesto en la recogida de aguas pluviales de algunos viales o en la falta de aparcamiento “un tema que preocupa a los vecinos que se quedan sin parking de residentes”. Estaba proyectado un aparacamiento en Elduayen que no se ha construido y, hasta ahora, no hay planificada ninguna actuación en este aspecto.
Ha habido despilfarro en varios lugares, como en la Porta do Sol, que había sido humanizada recientemente y en la que se han gastado 50.000 €; se ha “tirado” el valor de la piedra antigua, se han cambiado faroles por otros nuevos en los que se han gastado 600.000 €, “los antiguos están amontonados en una dependencia municipal”. No se sabe qué se va a hacer con la pérgola de la parada del autobús, y hay varias incógnitas en la gestión, la más grave “¿dónde está la piedra antigua que se ha quitado?, según nuestro cálculo esta superficie equivale a tres campos de fútbol y un valor de 1 millón de euros”.
