Tenía 34 años y limpiaba en un edificio de la rúa Teixugueiras. Es la última víctima de la siniestralidad laboral. La mujer cayó esta mañana desde una altura de 10 metros a través de un hueco que había en el suelo, perdiendo la vida en el acto. El hecho sucedió pasadas las 10 y media de la mañana cuando la víctima, que se encontraba limpiando detrás de una puerta en un primer piso, se precipitó al vacío después de que cediese el suelo.
El personal médico de la ambulancia, que acudió al lugar en menos de 10 minutos, no pudo hacer nada por salvarle la vida.