En esto ni Dios te salvará. Esto es lo que debió de pensar un ciudadano alemán cuando vio pasar por delante de sus ojos en el papamóvil a Benedicto XVI y percatarse de que no llevaba puesto ningún cinturón de seguridad.
Pues su cabreo fue tan monumental que no dudó en denunciar al santo pontífice, según recoge el diario Westfälische Rundschau.
El denunciante ha explicado que se cansó de ver como el Papa iba de un lado para otro por Alemania sin cumplir con las normas de seguridad y que en esa práctica ilegal no estuvo sólo, otras de las autoridades eclesiásticas que le acompañaron en esos desfiles siguieron el ejemplo del enviado de Dios en la tierra.