Sakineh Mohammadi Ashtiani podría morir colgada en la horca, según ha informado la agencia de noticias ISNA, a pesar de que el año pasado las autoridades iraníes decidieron suspender la lapidación a la que fue condenada por adulterio debido a la presión de la comunidad internacional.
El jefe del Poder Judicial en la provincia de Azerbaiyán Oriental ha señalado que los expertos islamistas analizan la posibilidad de que una persona condenada a morir lapidada pueda ser ahorcada. “La sentencia de Ashtiani se llevará a cabo tan pronto como nuestros expertos den a conocer su punto de vista sobre el tema”, ha dicho el letrado, aunque ha recalcado que “no hay prisa“.