Exactamente fueron 969, lo que supone un incremento del 21%, el tercero más alto del Estado tras Baleares y Extremadura. El dato se extrae de un informe de Detectys, firma especializada en investigación económica para empresas, entidades financieras, bufetes y aseguradoras, que sitúa el número de empresas en quiebra en toda España en 22.778 sociedades, lo que supone un 3,9% menos respecto a 2010.
Por provincias, el ascenso más elevado lo ha registrado A Coruña, en donde creció un 39% el número de empresas en quiebra sin declararse en concurso de acreedores, hasta llegar a las 431; en Lugo fueron 78, un 2,6% más; en Ourense, 159, un 10,4% más; y en Pontevedra, 301, un 11,1% más que en 2010. En la mayor parte de las ocasiones las firmas que quiebran sin declararse en concurso lo hacen así por no tener la liquidez suficiente para afrontar los gastos que supone hacerlo, como el pago para administradores judiciales o la contratación de abogados para llevar a cabo este proceso.
El estudio es especialmente fiable por el hecho de que los datos que aporta reflejan con más exactitud la realidad, ya que en muchas ocasiones los negocios sin empleados, que son la mitad de todos los que hay en España, cesan en su actividad sin que esa quiebra quede demostrada en ningún documento público.